Enseñar a nuestro perro a hacer sus necesidades fuera de casa es una de las principales cosas que queremos que el perro aprenda más rápido. Tenemos que estar muy pendientes de ellos para que aprendan a controlarse lo antes posible.
El propio instinto del animal hará que no haga sus necesidades en lo que considere su hogar, por lo que en las zonas donde duerme evitará hacer pis. Podemos aprovecharnos de este comportamiento para conseguir que haga sus necesidades en la calle.
No es algo que se consiga en dos días, debemos estar muy pendientes de ellos y tener mucha constancia y paciencia. Si aprendemos a qué edad nuestro cachorro aprenderá a controlar sus esfínteres podremos detectar irregularidades en el comportamiento del perro.
Cuanto más pequeño es un cachorro, más fácil es enseñarle a que no hagas sus necesidades en casa, ya que son más receptivos, en cambio si esperamos a que el perro crezca, será más complicado enseñarle, puesto que ya habrán cogido unos hábitos y debemos corregirlos.
Los perros no pueden controlar sus esfínteres hasta los 3 o 4 meses de edad, pero podemos utilizar por ejemplo un papel de periódico en los lugares que orine, de esta forma recordará que cuando quiera orinar deberá ir al papel de periódico. Basándonos en la repetición de este gesto el perro poco a poco irá aprendiéndolo.
Entre los 5 o los 8 meses el cachorro no podrá controlar sus esfínteres perfectamente y es probable que lo haga en lugares que no son adecuados. Si pasados estos meses el perro no ha aprendido, es aconsejable consultar con el veterinario para que lo chequee y nos aseguremos de que no padece algún otro trastorno.
Otra buena práctica es crear rutinas, por ejemplo sacarlo a la calle siempre en las mismas horas y siempre después de comer.
Cuando haga sus necesidades en el lugar correcto debemos reforzar su comportamiento y premiarle para que arrenda que ha hecho algo bien.
En resumen, debemos crear rutinas tanto de horarios como de lugares, empezar a enseñarle al perro donde debe hacer sus necesidades, desde la edad más temprana posible y ofrecerle premios cuando lo haga correctamente.
Debemos enseñar al perro desde el respeto y el cariño y con mucha paciencia. No sirve de nada pegarle para que aprenda, ay que hasta los 3 o 4 meses no podrá controlar sus esfínteres correctamente.