Las aves son unos animales que aunque estén enfermos no muestran síntomas de malestar o de padecer algún tipo de enfermedad, por este motivo, detectamos las enfermedades en las aves cuando ya están en un estado muy avanzado.
Debemos estar muy atentos a las aves para poder detectar posibles enfermedades a tiempo y tratarlas antes de que estén muy avanzadas.
Hay algunas señales que podemos utilizar para identificar posibles enfermedades:
Extrañas evacuaciones:
Debemos conocer el color y la consistencia de los excrementos de nuestra ave, para poder darnos cuenta de que si algún día observamos cambios en el color o la textura, puede ser síntoma de que empiece a padecer algún tipo de enfermedad.
Los excrementos varían en función del tipo de alimentación pero siempre suele ser similar. Si observamos que a pesar de mantener la misma alimentación, las heces adquieren una tonalidad amarillenta o rojiza, estamos ante una posible enfermedad. Unas heces rojizas indican que el ave está sangrando, lo que puede ser por algún tipo de parásito grave o algún tipo de problema en el sistema digestivo que debemos tratar de inmediato.
Cambios en el plumaje:
Las plumas de los pájaros suelen ser suaves y lisas, pero en caso de algún tipo de enfermedad pueden erizarse, estropearse o incluso caerse.
Cuando a un ave se le erizan las plumas puede ser un síntoma de enfermedades respiratorias y en caso de caída del plumaje, puede deberse a algún tipo de alergia o problema nutricional.
Secreciones nasales:
Aunque no sea algo muy común hay aves que pueden llegar a presentar algún tipo de moco, esto puede deberse a algún tipo de problema respiratorio o a que esté afectada por algún virus. En este caso lo mejor es acudir al veterinario para que sea atendida por un especialista.
Ojos apagados:
Revisa con regularidad los ojos de tu mascota, si notas que están sin brillo y apagados, puede estar afectada por alguna enfermedad ocular. Además si observamos que sus ojos no son llorosos o se ven resecos, puede ser síntoma de alguna infección.
Cambio en el timbre:
Cuando un ave lleva tiempo en casa con nosotros, podemos reconocer su timbre o su canto fácilmente, por lo que con facilidad notaremos cualquier cambio. Si notamos que el ave cambia su voz o en el canto presenta algún tipo de ronquido, puede ser que esté afectada por una enfermedad respiratoria.
Pérdida del apetito:
Una forma muy sencilla de conocer si un ave tiene algún tipo de enfermedad, es a través del apetito. Si un ave no quiere comer a pesar de que cambiemos el tipo de alimento que le ofrecemos, debemos acudir al veterinario para que la revisen y de esta forma si nuestra ave presenta algún tipo de problema será detectado a tiempo.
Ante cualquier tipo de cambio en nuestra ave, lo mejor será acudir a algún especialista para que pueda chequearla y tratarla correctamente para que esté completamente sana.